Calentamiento previo a una conferencia. Cómo poner a punto tu instrumento vocal
1. Haz ejercicios de respiración. Es un factor clave en el calentamiento.
2. Estira los músculos de la cara. Tensa y destensa al menos 5 veces estos grupos musculares: comienza por la frente y las cejas; luego la nariz; sonríe forzado; apreta los labios y la mejilla.
3. Masaje de cara. Cuando hayas hecho los estiramientos en la cara, hazte un masaje con tus manos aplicando con los dedos ligeros círculos: en ojos, frente, mejillas, labios, bigote, barbilla...
4. Mastica en vacío. Te permitirá calentar la mandíbula y músculos al rededor de la boca.
5. Calienta para iniciar con tu tono natural de voz. Usa la técnica del tosido, suave, al tiempo que emites el sonido /e/. Según los expertos ese /ehg/ es tu tono. Otra técnica es la del bostezo: hazlo con normalidad, como si tuvieras hambre o sueño, y emite sin vergüenza ese /aaah/ tan placentero.
6. Apóyate en las consonantes. Antes de iniciar la conferencia, habla mientras imagina que las consonantes son las patas delanteras de un caballo cuyas patas traseras son las vocales. Tira de las primeras y las segundas siempre las seguirán con naturalidad.
7. Estira tu cabeza. Hazlo hacia adelante, hacia atrás, hacia un lado y hacia otro. Luego haz rotaciones completas suaves y con muchísimo cuidado, hacia un lado y luego hacia el otro. Ponte recto, levanta los brazos y alarga la columna todo lo que puedas, sin forzar. Siéntete como si fueras un muelle.
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