Los 4 pasos para resolver cualquier conflicto laboral o personal

Estamos continuamente afrontando problemas o situaciones de malestar. Y cuando me piden consejo de qué hacer, siempre explico estos 4 pasos:

1) Resuelve el problema. Inténtalo y aprovecha para FLUIR y disfrutar en el proceso. Muchas veces nos molesta el afrontarlo, pero por pereza preferimos no hacer nada. Luego nos ponemos y hasta nos lo pasamos bien. Pero, aún así, quizá no seamos hábiles para resolverlo. Sigue el segundo paso.

2) ¿Puedes percibirlo de otro modo? Quizá no es tan grave, o inminente, e incluso tiene cosas positivas. La realidad está ahí, y es igual para todos. Al final depende de las lentes que te pongas. Pero no es tan fácil, y seguramente no basta para superarlo. Ve al tercer paso.

3) Acepta lo que hay. No te resistas. No pelees con la situación. Yo lo llamo tomar pastillas "melapela". Es la postura Zen de procurar no echar leña al fuego y pensar en la necedad de lo que te crea el problema. Sé compasivo. ¿Aún así no ha sido posible superarlo? Aún queda una última alternativa.

4) Huye. Deja a esa pareja, ese trabajo, esa situación que no has sido capaz de cambiar, percibirla de otro modo o aceptar.  

Procurad seguir este orden. Pero eso sí. Lo último siempre es tirar la toalla.